Desde nuestros inicios hace más de 50 años, siempre hemos tenido claro que nuestro compromiso con el producto y su calidad van más allá de una cuestión económica, no somos una industria que prioriza maximizar el beneficio como objetivo principal. Pueden llamarnos locos pero tenemos muy claro que la calidad de los productos que han alimentado a los nuestros, no tiene precio.
Sabemos que una leche de calidad depende directamente de la alimentación de la vaca. Por eso, durante todo el año, sembramos nuestros propios cultivos que, con la ayuda de un veterinario experto en nutrición, componen una dieta correcta y equilibrada principalmente a base de maíz, hierba seca y trébol.
Leche Certificada Bohal proviene al 100% de nuestras vacas y no de ganaderías ajenas. De esta forma nos aseguramos que la leche ha sido generada en las condiciones óptimas para el animal, que no son otras que un especial cuidado y atención de su salud y bienestar.
Leche Certificada Bohal se envasa en la bolsa de toda la vida. Es un producto auténtico y sin modificaciones, salido directamente de la granja y no creado a medida en un laboratorio. Un mínimo pero necesario proceso de pasteurización es lo que separa la leche recién ordeñada de tu café de todos los días.
Pero el esmero no termina con la elaboración del producto. Nuestro compromiso con el mismo y con los clientes se mantiene inalterable durante todo el proceso. Por ese motivo, los repartidores salen cada mañana con el objetivo de asegurar la mayor frescura.